En la actualidad, seguir los estándares de belleza puede ser bastante complicado. Uno solo puede imaginar cómo serán en el futuro, cuando la influencia de la sociedad se extienda a nivel mundial. Actualmente, los padres suelen tener influencia y decisión en cuanto a permitir que sus hijos tengan un teléfono, pero es prácticamente imposible evitar que se vean influenciados por el mundo exterior. Si lo pensamos detenidamente, al salir a la calle estamos bombardeados por una multitud de señales e imágenes diversas que impactan nuestra mente. No estamos tratando de hablar de teorías de conspiración, simplemente señalamos que todo está a nuestro alrededor. Lo único que podemos hacer es asegurarnos de que, si decidimos formar una familia, hagamos lo posible por guiarla por el buen camino. Si no lo hacemos, podríamos enfrentar problemas de autoimagen, entre otros, más adelante en la vida.

La niña
Valeria Lukyanova nació en Tiraspol, que actualmente se encuentra en Moldavia. Sin embargo, si le preguntas a sus habitantes, muchos consideran que Tiraspol está ubicada en el estado autónomo de Transnistria. Esta región del país está habitada principalmente por rusos étnicos que desean tener la capacidad de tomar decisiones sobre sus asuntos.

Sin importar cuál sea tu opinión personal sobre ese pequeño país de Europa del Este, una cosa es segura: a menudo puede ser un lugar relativamente sombrío. Moldavia en general nunca ha sido considerada una potencia económica, y mucho menos la región separatista que se encuentra en su interior. Valeria creció en ese entorno desde que era una niña.