Sin respuestas
Cuando el agente Colvin se dio cuenta de que Klynn no había ido ni vuelto a casa de la escuela ese día, empezó a pensar que algo iba mal. A Klynn le encantaba ir al colegio y ver a sus amigos, y este tipo de comportamiento no era acorde con su personalidad. Así que el oficial Colvin indagó un poco. Quería ir a casa de Klynn para asegurarse de que todo estaba bien.
En ocasiones, el agente Colvin acompañaba a Klynn a casa desde su lugar habitual de encuentro, por lo que sabía dónde vivía. Cuando llegó a su casa nadie respondía a la puerta, lo que le hizo pensar que no había nadie. Pero entonces oyó que alguien gemía al otro lado de la puerta y supo que tenía que hacer algo…