#10: Rechazo con cara de piedra
Nunca se sabe lo que ocurre a puerta cerrada. Pero eso no impide que nos lo preguntemos. No podemos evitar sentir curiosidad por la pareja protagonista de esta historia. Este narrador fue testigo una vez de cómo un chico le pedía matrimonio el Día de San Valentín, solo para que su novia lo rechazara. Y eso no es lo peor.
En lugar de salir del restaurante lo antes posible, se quedaron allí sentados unos 20 minutos. El tipo lloraba y suplicaba a su novia que cambiara de opinión. Ella no cedió. Al final, se levantó y se fue. Él todavía estaba llorando cuando pagó la cuenta. Pobre tipo. Si fuéramos nosotros, querríamos salir de la escena pública lo antes posible.