Estafa caritativa
La siguiente es una de las cosas más horribles que hemos visto en esta lista. Una cosa es reírse de tu mujer cagada por una gaviota y otra recaudar dinero para una asociación benéfica y luego guardarlo para comprar videojuegos. Estás abusando de la confianza de la gente y además reteniendo dinero de grupos que realmente lo necesitan.
Así que este chico se merecía totalmente lo que le pasó: que alguien se mudara y básicamente le robara toda su colección de videojuegos que consiguió con sus hábitos deshonestos. Supongo que, después de todo, lo que va, siempre vuelve.